La felicidad lleva tu nombre/ Happiness Is A Thing Called You.

El día a día/ The days we're living, Música/ Music

Me decían que sí, me decían que no. Que el amor existe, que el amor se acaba. Que el amor es un disfraz o una moda.

Y es cierto.

El amor es todo eso. Pero además es nerviosidad y tonterías; es profundidad y dificultad; es el todo y la nada.

Pero sobre todo es felicidad.

Y la felicidad lleva tu nombre.

No hay nada que se acerque a ese estado asombroso en el que entro cuando te tengo cerca. Esa energía es la que hace que las plantas crezcan y que las mareas lleguen puntuales a la orilla. Es lo que hace a la luna maravillosa y al sol, un corazón que late.

La felicidad hace que abra los ojos cada mañana y busque el arrullo de tu sonrisa. Y que de tus ojos sean mi cara lo primero que vean.

La felicidad lleva tu nombre.

Y el amor muda, y el amor cambia. Y es muchas cosas, y deja de serlas.

Pero también es felicidad.

Y lo será por siempre, mientras lleve tu nombre.

Lo que encontré en ti/ What I found in you.

Los días idos/ The days gone, Música/ Music

   Silencio.

   Tu respiración y la mía.

   La leña crepita en la chimenea. La lluvia golpea las ventanas.

   El viento azota los árboles, que se inclinan a su paso.

   Me acerco a ti.

   Callado, mirando hacia ninguna parte. Con las manos tamborileando sobre la tableta.

   Me sientes. Y sonríes.

   Sin decirme nada, me coges de la mano.

   Eso es lo que encontré en ti: compañía, sosiego, pasión, comprensión y silencio.

   Amor.

   Tú y yo. Y el resto queda afuera. Y el mundo en nuestro abrazo.

Después del baño/ After Bath.

Arte/ Art, El día a día/ The days we're living

   El vapor denso desdibuja las siluetas.

   Los azulejos resbaladizos y brillantes con ríos de agua que simulan lágrimas de las cañerías.

   En la ducha repiquetea un chorrito de agua. La llave, apenas cerrada, exhala todavía esa delicia tibia, que acaricia la piel y la libera.

   Después del baño todo carece de importancia. La piel enrojecida, el pelo húmedo y apelmazado simulan una caricia. Y son los labios y no es agua que corre; son los dedos y no vapor que acaricia. Sonrisa de plenilunio; recuerdos que no son vagos.

   Una mano limpia el espejo empañado. Y la palma roza el reflejo. Y brilla un recuerdo entre las sombras del vapor.

   Sonrisa. Caricia. Beso.

   Olor a agua que ha caído. El firme roce de la toalla que seca la húmeda altivez de lo limpio.

   Después del baño sólo hay liberación y silencio. Y una rara plenitud, efímera y quebradiza.

   Beso. Caricia. Sonrisa.

   Desnudez frágil.

   Amor renacido.