El tiempo todo lo cura/ Time heals everything.

Arte/ Art, El mar interior/ The sea inside, Los días idos/ The days gone, Música/ Music

   a Christian Bendek, por su cumpleaños.

   Miro el reloj. Sus esquinas son cuadradas. Y sin embargo las agujas las pasan una y otra vez con una facilidad casi mágica.

   Mi vida tiene los bordes agudos.

   Dicen que la paciencia todo lo logra. Que la dedicación es necesaria para conseguir lo que deseamos. Eso se me olvida. Porque, como mi vida, mi memoria está llena de aristas, y recordar me hace daño.

   Hubo un día en el calendario en el que estabas tú. Y el mundo era una elipsis, una curvatura sensual. Estaba tu espalda, que era un monumento, y tus labios, que sabían a sal.

   Hubo un mes en el que estabas tú. Y las noches eran maravillosas, abrazados y enredados como garabatos sin final. Estaban tu pelo de ceniza y tus ojos ansiosos, las manos de espuma, y las sábanas de cristal.

   Hubo un año en el que estabas tú. Y estaba yo. Y el mundo era un pañuelo que llevábamos al cuello, tú y yo, lleno de besos y de caricias, y de amor. De un amor especial, mío y tuyo o algo así.

   O algo así que éramos yo y tú.

   No recuerdo cuándo tu amor comenzó a dolerme; cuándo noté el paso del tiempo. Y me abandonaste. Te fuiste una tarde sin decir adiós y el reloj se detuvo en su esquina cuadrada y los días dejaron de fluir lo mismo que tu amor.

   Y sé que el tiempo sigue corriendo. Las horas pasan y los días mueren y los meses caen del calendario como las hojas de los árboles y como las rosas marchitas. Y sé que el tiempo todo lo cura, desde la cordura hasta la sinrazón. Que la dedicación tiene sus frutos y la paciencia todo lo logra. Y que todo llega a su fin

   Yo eso lo sé. Pero quién se lo dice a mi corazón, lleno de espinas, en las que tu olor está enganchado, y el recuerdo de tu voz y el calor de tus dedos… ¿Qué día, qué mes, qué año será aquel en el que no te recuerde, aquel en el que no evoque el sonido de tus pisadas al llegar, el peso de tu cuerpo al levantarte de la cama, la mirada delicada de cada despedida?

   No lo sé.

   Dicen que el tiempo todo lo cura. Todo. Menos el amor que aún siento por ti.