Ayer volvió la lluvia a Cracovia. Quizá por el hecho de venir de una tierra en la que la lluvia es un lujo y una casualidad, creo que disfruto del repique de las gotas contra el cristal. Es una fuente de inspiración, como tus escritos 😉
Eres muy amable (¡que me sonrojo!)
Tienes razón, la lluvia, el agua, es vida. Viviendo en una tierra en la que llueve, no creas que no echamos de menos la lluvia en el período estival. A mí, estos días nublados y el canturrear de la lluvia en las ventanas, me inspiran muchísimo.
Ayer volvió la lluvia a Cracovia. Quizá por el hecho de venir de una tierra en la que la lluvia es un lujo y una casualidad, creo que disfruto del repique de las gotas contra el cristal. Es una fuente de inspiración, como tus escritos 😉
Eres muy amable (¡que me sonrojo!)
Tienes razón, la lluvia, el agua, es vida. Viviendo en una tierra en la que llueve, no creas que no echamos de menos la lluvia en el período estival. A mí, estos días nublados y el canturrear de la lluvia en las ventanas, me inspiran muchísimo.